Un clásico y uno que nos habían recomendado mil veces antes de ir. Por fin fuimos y pudimos disfrutar de sus tapas y su buen ambiente. Es cierto que es como si fuera una pequeña parte de Granada en el centro de Madrid. Situado en Embajadores, La Pequeña Graná es un bar que a la hora del aperitivo y cena está literalmente hasta la bandera. Cuando fuimos nos tocó esperar un poco hasta que conseguimos coger un buen sitio, pero una allí ya no había quien nos echara 😛
La caña cuesta (si no recuerdo mal) 1,5€ y con ella te dan gratis una tapa que puedes escoger de entre todas las que tienen: nosotros probamos en esa ocasión la berenjena frita con miel (en portada), y las tortillitas de camarones. El servicio es atento y rápido. Además, tienen un salón abajo que es ideal para celebraciones, cumpleaños, etc. Sobre eso no puedo decir mucho, pero ¡lo probaremos!
Más información:
Rango de Precio:
Económico, con la caña te regalan una tapa a elegir. Dispone de menús para grupos.
Ambiente:
Concurrido, ideal si buscas un buen rato con la familia y amigos. Es posible que te toque esperar un poco, ya que suele estar bastante lleno. No dispone de terraza, al menos cuando fuimos.
Horario:
Abierto lunes de 19:00 – 00:00h, martes, miércoles, jueves, y domingo de 12:00h a 00:00h; viernes y sábados de 12:00h a 02:00h.
Localización:
Calle de Embajadores, 124, 28045 Madrid